Mommy
Time
Mommy Time
Hace 2 años me convertí en Madre por primera vez siendo expat en los Países Bajos, ser Madre me dio un profundo sentido de realización y propósito. Y sí, también me hizo sentir al mismo tiempo tanto la persona más feliz del mundo como también la más exhausta. Realmente desafió tanto mi capacidad física como mental, con un corazón que explotaba de amor y un cuerpo tan agotado que por momentos sentía desmoronarse…que increíble acto de amor desinteresado y genuino cuidado hacia otra persona que uno apenas empieza a conocer y por quien uno ya sabe daría su propia vida por hacer feliz.
Ser Madre tiene sus grandes satisfacciones como desafíos. Genera ocasiones de incalculable felicidad, risas y amor; sin embargo también habrán días en los cuales uno siente darse por vencido, en el que sacrificar su propia rutina y tiempo personal día tras día se torna realmente duro. Es aún más duro cuando eres Madre viviendo como expat fuera de tu País, sin tu entorno conocido en el cual sabes muy bien cómo manejar cualquier imprevisto. Donde tienes a otros con quienes sabes puedes contar ciegamente.
Criar un hijo en el exterior implica, entre otras cosas, no tener a tu familia y amigos cercanos para darte una mano cuando lo único que necesitas es dormir o simplemente tener un tiempo mínimo privado para ‘ti misma’ y poder recargar energías para sentirte ‘tu’ misma nuevamente. Sin embargo, también es verdad que durante aquellos días donde te sientes viviendo la vida de otra persona, una profunda transformación está sucediendo dentro tuyo. Estás despertando una dimensión tuya completamente nueva y que te ayudará a brillar en esta nueva etapa que recién comienza en tu vida, con un renovado sentido de propósito. Tendrás la habilidad de adaptar tu estilo de vida y optimizar tu tiempo para aprovechar tus días al máximo. Aprenderás a sobrellevar estos desafíos y emerger más fuerte y madura, tanto como mujer, pareja y ahora también, Madre. Cuidar todas estas ‘versiones’ de ti misma es absolutamente esencial para sentirte balanceada y disfrutar cada faceta de tu vida en su máxima expresión.
Estas sesiones están orientadas a Madres viviendo fuera de su propio País (expats) y que sienten la necesidad de una perspectiva nueva y fresca, así como apoyo y consejo para romper con la rutina entumecida y poder descubrir y potenciar todas las bendiciones y oportunidades que devienen de la maternidad como Expat.